Quiero que te pares un momento a pensar cómo es tu estilo de vida . Qué es lo que haces cada día con tu tiempo. Por qué lo haces. Para quién lo haces. ¿Cuáles son las presiones o circunstancias externas que te influyen para actuar de un modo u otro? Porque casi todos tenemos en mente el estilo de vida que nos gustaría tener: son nuestros sueños, aunque el problema es que no hemos llegado a definirlos claramente, con detalles, están solo en el aire. ¿Qué es lo que me gustaría hacer con mi vida? Casi todos tenemos también en mente algunas razones por las que no podemos tener ese estilo de vida que queremos: Me gustaría viajar lejos, pero no puedo porque estoy trabajando y hay otras personas que dependen de mí. Quiero bajar de peso 10 kilos, pero el problema es que no tengo suficiente fuerza de voluntad, o que por mis obligaciones tengo que comer fuera de casa, etc. Quisiera ahorrar dinero, pero al final siempre me lo gasto en tonterías y prácticamente no llevo el control.
Cuando alguien dice algo de ti que no te gusta, cuando alguien te critica , y tú reaccionas, la persona interpreta que lo que ha dicho te afecta. Que tiene cierto poder sobre ti. Si, en cambio, permaneces impasible, o das una respuesta asertiva , la persona interpreta que tienes suficiente sangre fría para no tener en cuenta las opiniones ajenas cuando no construyen. Todo esto ocurre muchas veces a nivel inconsciente, pero es algo que podemos ver en el día a día. Además, la cosa se complica todavía más. Porque no siempre sabemos a ciencia cierta lo que dicen de nosotros. Porque no siempre te lo dirán a la cara. Y ahí entra lo que tú piensas que dicen de ti, mezclado con tu propia falta de autoestima ; tiendes a pensar que hablan peor de ti de lo que en realidad hablan, o como no tienes detalles, lo magnificas y lo haces aún más doloroso. Por tanto, creo que la mejor manera de evitar que te afecte lo que dicen de ti, es entender que lo que los demás piensan es tan sólo eso: una