Insomnio por ansiedad: ¿cómo combatirlo?

Los que tenemos ansiedad sabemos que a veces puede hacerse muy cuesta arriba eso de dormir. Si padeces de insomnio por ansiedad, probablemente pasas más de una noche dándole vueltas a la cabeza, nervioso por algo que va a ocurrir o por algo que ocurrió.

Si no logras dormir debido a la ansiedad, hay sin embargo una serie de técnicas que pueden ayudarte a superar ese problema. Déjame darte algunos consejos en este post.

¿De dónde viene el insomnio por ansiedad?

insomnio por ansiedad

El sueño es tremendamente importante para que podamos recargar las pilas. Los expertos recomiendan dormir 7 horas al día. Cuando no lo hacemos, nuestro cuerpo lo nota. Y si esto sucede día tras día, sin duda es el indicativo de que algo no marcha bien y puede tener consecuencias peligrosas.

En ocasiones el insomnio por ansiedad, repetido y constante, se considera uno de los síntomas de las personas con trastorno con ansiedad generalizada. Si tienes problemas para conciliar el sueño porque le estás dando vueltas a algún pensamiento obsesivo, y esto te sucede con cierta frecuencia, es vital entender cuál es la fuente de tu dificultad para dormir.

El origen de nuestro insomnio viene muchas veces de pensamientos obsesivos sobre problemas relacionados con nuestro miedo. Tenemos miedo a lo que pueda pasar, recordamos y revivimos una y otra vez situaciones que nos han causado dolor, vergüenza, enfado, etc.

A veces nos puede costar dormir incluso cuando estamos cansados. Sentimos el cansancio, pero aún así no acabamos de conciliar el sueño. Y seguimos dando vueltas en la cama. Luego todo esto tiene unas repercusiones a nivel personal, social y laboral, ya que si no has descansado lo suficiente bien (y esto implica haber tenido un sueño reparador), tu cuerpo lo puede notar.

¿Cuáles son las claves para vencer el insomnio por ansiedad?

Si tienes dificultad para conciliar el sueño, debes tener muy claro que esto es algo serio. Lo primero que te recomiendo es que apliques algunos de estos consejos.

1. Evita las bebidas con cafeína. Evita coca-colas y cafés durante las horas previas al sueño, incluso por la tarde. No queremos que ninguna bebida contraproducente contribuya a acentuar nuestros nervios, ansiedad y dificultad para dormir.

2. Intenta poner la mente en blanco. Cuando te vayas a la cama, encuentra la posición en la que más cómodo te sientas. Cierra los ojos. Pon la mente en blanco, no pienses en nada. Concéntrate, por ejemplo, en otra cosa: en tu respiración, en el silencio.

3. Escucha una música relajante. Es una de las técnicas que se utilizan en mindfulness, además de la respiración. A medida que escuches la música, irás notando un profundo sueño, ya que permite calmar los pensamientos y enfocarte más en las sensaciones.

4. No abuses de somníferos. Los somníferos pueden ayudarte en algún momento dado. Pero desde el momento en el que se convierten en una rutina porque si no no te puedes dormir, estás entrando en terreno peligroso. Lo ideal es prescindir de ellos y aplicar técnicas de relajación para el sueño.

5. Acude a un profesional. Si a pesar de intentar aplicar estas técnicas no logras quedarte dormido y descansar, entonces sí que es recomendable que no lo dejes pasar más tiempo y acudas a un profesional. Dormir mal durante mucho tiempo seguido es algo serio y hay que procurar controlarlo para que nuestro cuerpo descanse.

6. Evita las actividades que te activen. Uno de los problemas que he tenido a veces es que, si voy al gimnasio demasiado tarde, a veces tengo problemas para dormir. Estoy demasiado activo y luego es normal que te cueste conciliar el sueño. Intenta ir un tiempo antes y pasar un rato relajado antes de meterte en la cama.

7. Controla la luz. Es curioso cómo nuestro cerebro reacciona ante la luz; tenemos una hormona, llamada "melatonina", que produce nuestra glándula pineal y que es la que provoca que nos quedemos dormidos. Nuestro reloj biológico tiene mucha dependencia del grado de luz que hay a nuestro alrededor. Si te vas a dormir y tienes la ventana abierta, es probable que entre algo de luz de las farolas de la calle. Y eso te afecta a la hora de dormir. Intenta que la habitación esté oscura o con una penumbra muy tenue.

8. No duermas mucha siesta. Si dormimos demasiado durante la tarde, luego es habitual que no podamos conciliar el sueño.

9. No comas demasiado. Las digestionas pesadas también pueden influir mucho a la hora de dormir. Procura cenar ligero, una ensalada, algo de verdura, pescado y poco más. Evita las comidas grasientas. Por otro lado, si comes fruta, mejor que sea antes que después de la cena, ya que generarás una sensación de saciedad que hará que saciará tu hambre.

Supera tu ansiedad

Sabemos que una cosa son los problemas para dormir que genera la ansiedad. Pero no todo se queda ahí. A medida que consigas superar tu ansiedad, también tendrás menos problemas para conciliar el sueño.

Durante el día, nos vemos sometidos a toda clase de sentimientos y emociones que van influyendo en nuestro día a día. Llega un momento en el que no podemos más debido al alto estrés emocional. Si te gustaría superar tu ansiedad, te recomiendo que leas este post en el que te ayudo a tratarla.

¿Sufres de "insomnio por ansiedad"? ¿Tienes problemas para conciliar el sueño durante la noche? Te invito a que me dejes tus experiencias en los comentarios, y si te han servido estos consejos, déjame algún comentario o (si quieres) compártelos en tus redes sociales.

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